Para las instalaciones de paneles fotovoltaicos podemos encontrar distintos tipos de estructuras. Cada una de ellas se adapta a diferentes requerimientos y necesidades dependiendo de distintos factores como el terreno donde se instalan o las condiciones meteorológicas.

ESTRUCTURAS FIJAS, MÓVILES Y FLOTANTES

Ya que España es uno de los países europeos con mayor cantidad de horas de sol, hacen que la energía solar fotovoltaica sea muy útil y eficiente.

Existen distintos tipos de estructuras para la instalación de paneles fotovoltaicos, adaptándose a los diferentes requerimientos y necesidades dependiendo de factores como el terreno, el clima, la necesidad de mover o no los paneles, etc. Podemos destacar las siguientes estructuras:

Estructuras fijas a suelo:

Este tipo de estructuras son las más comunes de ver. Consisten en instalaciones mediante carriles strut 41x41x2,5 mm de espesor que permiten la instalación de paneles fotovoltaicos encima. Para hacer este tipo de instalaciones hay que realizar un estudio previo sobre la inclinación de y fuerzas que debe soportar la instalación teniendo en cuenta la fuerza del viento, condiciones meteorológicas y el terreno sobre el que se va a instalar. De esta manera, se evitarían futuros desperfectos en la instalación.

Estructuras móviles:

Las estructuras móviles son las que tienen un coste más elevado y requieren de un mayor tiempo de instalación, así como sistemas más complejos.  Se instalan cuando existe una necesidad de realizar movimiento en las placas solares con el objetivo de captar la luz solar. Dependiendo del lugar, obstáculos cercanos o condiciones metrológicas puede ser necesario este tipo de instalaciones ya que si no los paneles fotovoltaicos no captarán la luz solar suficiente y estaremos perdiendo energía.

Estructuras flotantes:

Estas estructuras son uno de los sistemas más novedosos para aplicar en los paneles fotovoltaicos. ¿Cómo se realiza su instalación? En el agua mediante módulos flotantes. Con este sistema se pueden instalar grandes cantidades de paneles fotovoltaicos sin la necesidad de ocupar terrenos agrarios y quitar espacio para otros servicios. Además, genera beneficios para los ecosistemas en los que se instalan ya que reducen la temperatura del agua y como consecuencia su evaporación.

Hoy en día, podemos considerar a la fotovoltaica como uno de los pilares fundamentales de la demanda energética.